Translate PaperArtículo originalInfluencia de bioestimulantes sobre el crecimiento y el rendimiento de cultivos de ciclo corto en Manabí, Ecuador
[0000-0003-1371-7345] Eduardo Héctor-Ardisana [1] [*]
[0000-0001-7095-051X] Antonio Torres-García [2]
[0000-0002-2245-2943] Osvaldo Fosado-Téllez [1]
[0000-0003-3511-4019] Soraya Peñarrieta-Bravo [2]
[0000-0002-8386-1732] Jorge Solórzano-Bravo [3]
[0000-0002-4101-4404] Vicente Jarre-Mendoza [3]
[0000-0003-4321-2794] Fabián Medranda-Vera [3]
[0000-0002-0237-6189] José Montoya-Bazán [3]
[1] Instituto de Posgrado, Universidad Técnica de Manabí, Ecuador
[2] Facultad de Ingeniería Agronómica, Universidad Técnica de Manabí, Ecuador
[3] Estudiante
de la Maestría en Agronomía, mención Producción Agrícola Sostenible,
Facultad de Ingeniería Agronómica, Universidad Técnica de Manabí,
Ecuador
[*] Autor para correspondencia: ehectorardisana@gmail.com
RESUMENEl modelo
agrícola de la Revolución Verde ha conducido a la degradación paulatina
de los suelos, lo cual está motivado por los impactos que causa, entre
los que destaca el uso indiscriminado de los fertilizantes sintéticos
que, si bien incrementan los rendimientos hasta cierto punto, también
acidifican el suelo, acumulan sales, provocan estrés hídrico y
contaminan las aguas y las cosechas. Los bioestimulantes constituyen una
alternativa a estas prácticas, al ser microorganismos o productos que
influyen favorablemente sobre las plantas, no sólo por la aportación de
nutrientes sino por contener sustancias como proteínas, aminoácidos,
ácidos húmicos y fúlvicos, reguladores del crecimiento, y otras
moléculas benéficas. Se presentan los resultados preliminares de varias
investigaciones sobre el empleo de bioestimulantes orgánicos (bioles,
lixiviados de estiércol y de vermicompost, ácidos húmicos,
microorganismos eficientes) sobre cuatro especies de ciclo corto:
estevia (Stevia rebaudiana Bertoni), acelga (Beta vulgaris L. subsp. cicla), maní (Arachis hypogaea L.) y ajonjolí (Sesamum indicum
L.). Se evaluaron variables que caracterizan el crecimiento y
rendimiento de cada una de las especies estudiadas, durante un ciclo de
cultivo, en diseños experimentales de bloques completamente
aleatorizados. En general, el empleo de alguno de los bioestimulantes
ensayados permitió resultados similares o superiores a los que se obtuvo
con la fertilización química en las cuatro especies estudiadas. Los
resultados alcanzados estimulan el empleo de estos bioestimulantes como
sustitutos o complementos de la fertilización química convencional en
estas especies, contribuyendo a la sostenibilidad de la producción
agrícola sin perjuicio del medio ambiente.
INTRODUCCIÓNEn
Sudamérica, la producción agrícola es diversa y compleja, resultando de
las tradiciones de cada país, y se obtiene a costa de una profunda
huella ecológica, como consecuencia de la necesidad de los países del
subcontinente de mantenerse como productores y exportadores de rubros
agrícolas que tienen un papel importante en sus balanzas comerciales 1.
Ecuador
no se aparta de la tendencia a explotar la tierra de manera intensiva e
indiscriminada; entre los insumos que se utilizan para lograr
rendimientos adecuados se encuentran los fertilizantes nitrogenados,
fosfóricos y potásicos, de los cuales el país aplicaba en el año 2014
una media de 124,03 kg ha-1, cifra ligeramente inferior al promedio del subcontinente que es de 135,46 kg ha-1 (2
pero sin dudas muy elevada. Además, la mayoría de los agricultores
aplica los fertilizantes sin considerar las cantidades de nutrientes
presentes en los suelos ni las necesidades de los cultivos, lo que lleva
a un uso desmedido que tiene consecuencias ambientales negativas.
Una
de las alternativas orgánicas para estimular los procesos de
crecimiento y desarrollo de las plantas es el empleo de bioestimulantes,
que se definen como sustancias o microorganismos que aplicados a las
plantas, incrementan la absorción y asimilación de nutrientes, su
tolerancia al estrés o mejoran sus características agronómicas,
independientemente del contenido de nutrientes que aporten 3. Entre los bioestimulantes más usados se encuentran el vermicompost, sus lixiviados y los microorganismos eficientes 4-7.
La estevia (Stevia rebaudiana Bertoni), la acelga (Beta vulgaris L. subsp. cicla) y el ajonjolí (Sesamum indicum L.) son cultivos de ciclo corto que no se encuentran entre los preponderantes en la agricultura ecuatoriana. El maní (Arachis hypogaea
L.), también de ciclo corto, aunque ocupa áreas agrícolas bastante
superiores, tampoco es un rubro de alto impacto en el sistema agrícola
del país. Sin embargo, el aprecio de los consumidores por estas especies
se está incrementando: la estevia por su uso edulcorante y medicinal 8, la acelga por sus propiedades antioxidantes y anticancerígenas 9, el maní por su alto contenido de aceites, proteínas y carbohidratos 10 y el ajonjolí por el poder anticancerígeno del sesamol que contienen sus semillas 11.
Ante
este incremento en la demanda y consiguientemente en el interés de los
productores se hace necesario proponer alternativas que permitan obtener
altos rendimientos sin que se cree una dependencia de los fertilizantes
químicos sintéticos, lo que afectaría la sostenibilidad económica y
ecológica de estos agroecosistemas.
Esta
investigación tuvo como objetivo evaluar el efecto de varios
bioestimulantes sobre el crecimiento y el rendimiento de estas especies,
en comparación con productos fertilizantes de origen químico-sintético.
MATERIALES Y MÉTODOSUbicación de los experimentosLos
ensayos en estevia y acelga se desarrollaron en el campus experimental
“La Teodomira” de la Facultad de Ingeniería Agronómica de la Universidad
Técnica de Manabí, ubicada en la parroquia Lodana, cantón Santa Ana, a
01º14’ LS y 80º23’ LW con una altitud de 60 m s.n.m, entre junio y
agosto del año 2018, bajo condiciones de cultivo semiprotegido. El
estudio en maní se hizo en la finca “Don Fabián”, ubicada en la vía
Chone-Calceta, a 0º50’ LS y 80º15’ LW con una altitud de 50 msnm, en el
período comprendido entre agosto y diciembre de 2017. El estudio con el
ajonjolí se efectuó en la finca de la familia Montoya Bazán, situada en
la vía Babahoyo-parroquia Febres Cordero, a 02º09’ LS y 79º53’ LW con
una altitud de 20 m s.n.m, entre junio y septiembre de 2018. Las tres
primeras localidades pertenecen a la provincia de Manabí y la última a
la provincia de Guayas, Ecuador.
Material vegetalTodas
las semillas utilizadas fueron de origen certificado. En la estevia se
trabajó con la variedad Morita 2; en acelga se utilizó la variedad
Fordhook Giant; en el maní se empleó la variedad “Criolla Caramelo” y en
ajonjolí la variedad “Portoviejo 1”. Las semillas de estevia, acelga y
ajonjolí se sembraron en bandejas germinadoras con alvéolos de 5 x 5 cm
(una semilla por alvéolo) con suelo y residuos vegetales descompuestos,
en proporción 1:3 (v/v), y una vez obtenidas las plantas con adecuado
vigor se trasplantaron al lugar del experimento. El maní se sembró
directamente colocando dos semillas por sitio para garantizar la
germinación.
BioestimulantesTodos
los bioestimulantes empleados en esta investigación son productos de
composición orgánica, concebidos para proporcionar a los productores
alternativas sostenibles a la fertilización química. Dos de ellos
(Bioactivado y Humisil®) son formulaciones comerciales a base
de microorganismos o ácidos húmicos; los restantes (lixiviado de
estiércol bovino, lixiviado de vermicompost de estiércol bovino,
lixiviado de gallinaza, biol artesanal, microorganismos eficientes) son
productos de fabricación sencilla a partir de restos de cosechas o
excremento animal, que pueden ser elaborados por los productores en sus
propias fincas.
El lixiviado de estiércol
bovino (LEB) y el lixiviado de vermicompost de estiércol bovino (LVEB)
fueron suministrados por el Ministerio de la Agricultura, y se producen
en el sitio la Cañita de la Parroquia Charapotó del cantón Sucre,
provincia de Manabí, Ecuador. La preparación del lixiviado de gallinaza
(LG) se realizó en un tanque de 100 L al que se le agregaron 25 kg de
gallinaza y 50 litros de agua. La mezcla se dejó fermentar por 45 días y
posteriormente se filtró el lixiviado a través de una tela fina. Los
lixiviados se aplicaron con bomba manual mediante aspersión foliar, y se
realizaron cuatro aplicaciones cada 10 días después del trasplante
(DDT) o siembra del cultivo, con un volumen de producto equivalente a
1000 L ha-1.
El producto Bioactivado fue suministrado por Bbo Agro, S. A. de Guayaquil, Ecuador, y es un biopreparado líquido a base de Saccharomycetes sp., Bacillus sp., Lactobacillus
sp. y actinomicetos. El Biol artesanal se preparó con productos
orgánicos y residuos de cosecha en las siguientes proporciones: 18 kg de
estiércol bovino, 13,5 kg de residuos de cosecha de alfalfa y arvejas,
0,9 kg de levadura, 9 kg de melaza, 13,5 kg de cascarilla de arroz y 4 L
de suero de leche bovina. Todos los componentes se homogeneizaron en un
tanque plástico hasta 200 L con agua. Posteriormente se tapó el tanque y
se dejó fermentar la mezcla por 45 días a la sombra, a temperatura
ambiente. Al cabo de este tiempo el contenido del tanque se filtró a
través de una tela fina. Ambos productos se aplicaron por aspersión con
una bomba manual sobre el suelo, junto a la planta; se hicieron tres
aplicaciones cada 10 DDT, con un volumen de producto equivalente a 1000 L
ha-1.
El Humisil® es producido por Greentech®
en Guayaquil, Ecuador, y contiene ácidos húmicos 18 %, N-P-K 4,02 % y
sílica activa 1,5 %. Se realizaron cinco aplicaciones foliares por
aspersión con una bomba manual, cada 15 DDT, con un volumen de producto
equivalente a 1000 L ha-1.
Los
microorganismos eficientes (ME) se produjeron en la Estación
Experimental de la Facultad de Ingeniería Agronómica de la Universidad
Técnica de Manabí, cultivando Lactobacillus plantarum (104 UFC L-1), Lactobacillus casei (104 UFC L-1), Rhodopseudomonas palutris (103 UFCL-1), Saccharomyces cerevisiae (103 UFC L-1),
melaza 10 % y leche pasteurizada 15 %. Después de ajustado el pH a 3,5
la mezcla se dejó fermentar a temperatura ambiente en condiciones
anaeróbicas por 15 días, y a continuación se proporcionó aire
permanentemente mediante bombeo por 15 días. Finalmente se filtró la
mezcla a través de una tela fina. Se realizaron 5 aplicaciones cada 10
DDT. En cada una de ellas se suministraron 150 ml del preparado de
microorganismos eficientes al suelo, alrededor de la planta.
Fertilizantes químicosLa
fertilización con N-P-K en cada cultivo se realizó por aplicación al
suelo, con las formulaciones y dosis que utilizan los productores en sus
fincas. El calcio se aplicó por aspersión foliar, según lo recomendado
por varios autores 12,13.
Diseño experimental y variables evaluadas
En los experimentos realizados en las cuatro especies se utilizaron diseños de bloques completos al azar.
En
el experimento con Stevia se incluyeron cuatro repeticiones, cada una
con 24 plantas, de las cuales se evaluaron las 6 plantas centrales de la
parcela. Los tratamientos experimentales consistieron en dos
concentraciones de calcio (2 y 5 g L-1) aplicado foliar (10 mL planta-1, 5 aplicaciones cada 15 DDT), dos diluciones de Humisil® (1/10 y 1/20 v/v), fertilización química con NPK (18-18-18; 20 g planta-1
a los 15 DDT) y un tratamiento sin fertilizantes o bioestimulantes. A
los 45 DDT se determinaron la altura de la planta (cm), el diámetro del
tallo (cm) y la cantidad de hojas por planta. La cosecha de hojas y
tallos se realizó a los 60, 75 y 90 días, y sobre la base de la masa
seca total de estos se estimó el rendimiento (tha-1) de cada tratamiento.
En
el estudio realizado en acelga se emplearon tres repeticiones. Cada
repetición incluyó 24 plantas, de las cuales se evaluaron las 6 plantas
centrales de la parcela. Los tratamientos experimentales fueron:
fertilización química con NPK (15-15-15; 20 g planta-1, de
ellos 10 g como fertilización de fondo y 10 g a los 15 DDT), dos
diluciones de lixiviado de vermicompost de estiércol bovino (1/10 y 1/20
v/v) y dos de microorganismos eficientes (1/10 y 1/20 v/v). A los 60
días se determinaron la longitud y el ancho de la hoja (cm), y la masa
seca (g) y el volumen de la raíz (cm3). Se realizaron dos
cosechas a los 38 y 60 días, y con la masa fresca total (g) de la
biomasa de ambas se estimó el rendimiento (t ha-1) de cada tratamiento.
El
estudio realizado en maní incluyó cuatro repeticiones. Los tratamientos
consistieron en tres diluciones de lixiviado de estiércol bovino (1/10,
2/10 y 3/10 v/v), tres de lixiviado de gallinaza (1/10, 2/10 y 3/10
v/v), tres de lixiviado de vermicompost de estiércol bovino (1/10, 2/10 y
3/10 v/v), fertilización química con NPK (100-25-50; 5 g planta-1,
como fertilización de fondo) y un tratamiento sin fertilizantes ni
bioestimulantes. A los 60 días se determinó la altura (cm) de tres
plantas tomadas al azar en el centro de la parcela. En el momento de la
cosecha (120 días) se contó la cantidad de nódulos presentes en las
mismas plantas; se tomaron también 100 vainas al azar en cada parcela a
las que se determinó la masa seca (g) para estimar el rendimiento de
vainas secas (t ha-1). A los granos de estas vainas se les determinó la masa seca (g) para estimar el rendimiento de granos secos (t ha-1).
En
el experimento con el cultivo del ajonjolí se establecieron tres
repeticiones. Los tratamientos fueron: Bioactivado (1/20 v/v), biol
artesanal (1/20 v/v), fertilización química con NPK (50-25-50; 125 g
planta-1 a los 20 y 45 DDT) y un tratamiento sin
fertilizantes ni bioestimulantes. En 20 plantas seleccionadas al azar en
cada unidad experimental se midieron las siguientes variables: altura
de la planta (cm) a los 110 DDT; altura de carga la altura a la que se
encuentra la cápsula más baja (cm) a los 60 DDT; cantidad de cápsulas
por planta a los 130 DDT; en ese último momento se determinó la masa
seca (g) de las semillas de estas cápsulas para estimar el rendimiento
de cada tratamiento (k g ha-1).
Análisis estadísticoDespués
de comprobadas la normalidad y homocedasticidad de los datos (con las
pruebas de Kolmogorov-Smirnov y de Levene, respectivamente) los datos de
las variables se procesaron con un análisis de varianza simple. Las
medias de los tratamientos se compararon con la prueba de Tukey
(p<0,05). Se utilizó el software IBM SPSS Statistic v.21.
RESULTADOS Y DISCUSIÓNEn las Tablas 1- 4
se presentan los resultados de la influencia de los diferentes
productos aplicados en cada una de las especies sobre las variables del
crecimiento y el rendimiento.
En estevia, no se observaron diferencias
significativas en la variable diámetro del tallo. En cambio, se
encontraron diferencias estadísticas en las restantes variables,
destacándose en la altura de la planta el Humisil® (1/10 v/v) y el calcio (2 g L-1);
en la cantidad de hojas, los mejores resultados se obtuvieron con el
tratamiento fertilizado con NPK, con las dos diluciones de Humisil® y con el calcio (2 g L-1). Es destacable que en estas tres variables los tratamientos con Humisil® (1/10 v/v) y calcio (2 gl-1)
siempre produjeron resultados estadísticamente similares o superiores a
los obtenidos con NPK. En el rendimiento estuvieron a un mismo nivel el
calcio (2 g L-1), el Humisil® (1/10 v/v) y el tratamiento fertilizado, aunque este último no se diferenció del control sin aplicación.
En
esta especie, los estudios sobre el empleo de bioestimulantes se han
concentrado en la inoculación de las plantas con rizobacterias
promotoras del crecimiento y hongos micorrícicos arbusculares o
combinaciones de estos 14,15, y en menor medida se han combinado microorganismos y productos orgánicos como el estiércol y el vermicompost 16.
Los resultados obtenidos en esas investigaciones, superiores en todos
los casos a los alcanzados con fertilizantes químicos, han sido
atribuidos a una mejora en la absorción de nutrientes por las plantas.
Los rendimientos que se obtienen con el empleo de productos bioestimulantes como el Humisil®
por lo general se atribuyen no a la concentración de nutrientes
presentes en ellos, sino al aporte de ácidos húmicos. Estas sustancias
activan el metabolismo vegetal, incidiendo favorablemente en la
absorción y asimilación de nutrientes, la absorción de agua, e
incrementando la tolerancia a distintos tipos de estrés 3,4,6.
En cuanto al calcio, este elemento juega un papel importante como
mensajero en las respuestas vegetales a las señales ambientales y
hormonales 17. En estevia, en particular,
las deficiencias de calcio provocan necrosis en los primordios foliares,
reducción en el contenido de esteviósidos, ramas quebradizas y raíces
cortas y delgadas 18. Estos efectos pueden
explicar los resultados obtenidos en las variables altura de la planta y
cantidad de hojas, componentes determinantes del rendimiento en esta
especie.
En acelga (Tabla 2), la
aplicación de bioestimulantes produjo resultados que igualaron o
superaron a la fertilización con NPK en todas las variables relacionadas
con el crecimiento vegetativo. En cuanto al rendimiento, las dos
diluciones de lixiviados de vermicompost de estiércol bovino fueron
significativamente superiores a la fertilización con NPK; el tratamiento
con microorganismos eficientes 1/20 (v/v) no difirió de los
tratamientos con lixiviados ni del tratamiento fertilizado con NPK; a su
vez, la fertilización con NPK no mostró diferencias significativas con
la dilución 1/10 (v/v) de microorganismos eficientes. Es decir, la
aplicación de cualquiera de los dos bioestimulantes siempre condujo a
rendimientos iguales o superiores a los obtenidos con NPK. Los
bioestimulantes más usados en acelga han sido: el Kelpak, rico en
auxinas y citoquininas, producido a partir del alga marina Ecklonia maxima, y que incrementa la masa seca de hojas y raíces 19, el VIUSID, con alto contenido de diversos aminoácidos, que eleva los rendimientos en un 29,50 % 20,
y los microorganismos eficientes, que conducen a incrementos en el
contenido de clorofila y a mejoras en el suelo, pero no a aumentos
significativos de la biomasa 21.
Varios bioestimulantes (lixiviado de
gallinaza 3/10 v/v, y lixiviados de vermicompost de estiércol bovino
2/10 y 3/10 v/v) alcanzaron valores altos en las variables altura de la
planta, nódulos por planta y rendimiento de vainas secas obtenidos en
maní (Tabla 3), similares a la fertilización con NPK.
En particular, con el lixiviado de gallinaza 3/10 (v/v) y con las tres
diluciones de lixiviado de vermicompost de estiércol bovino se lograron
niveles de nodulación significativamente superiores a los del suelo al
que no se aplicó ningún producto, aunque es evidente que en el suelo
existen poblaciones de rizobios compatibles con el cultivo. Otros
autores han encontrado incrementos similares en este proceso simbiótico
en presencia de vermicompost 22-24.
El
rendimiento de granos secos con NPK fue superado significativamente por
el lixiviado de vermicompost de estiércol bovino en las diluciones 2/10
y 3/10 (v/v). En esta especie, la aplicación del bioestimulante
Stimulate®, rico en auxinas, citoquininas y giberelinas,
favorece la producción de semillas vigorosas y sanas, solo o combinado
con elementos químicos 25,26. El bioestimulante Nutrifer® 202, aunque incluye varios tipos de micronutrientes de origen inorgánico, contiene también extractos de algas marinas (Ascophyllum nodosum)
que aportan aminoácidos, vitaminas y fitohormonas, y actúa sobre el
metabolismo general de las plantas de maní favoreciendo su crecimiento,
desarrollo y nodulación, sobre todo en combinación con Bradyrhizobium sp. 27. El empleo de vermicompost ha causado incrementos en los rendimientos en esta especie 28,29 por lo que se puede esperar efectos similares en sus lixiviados, como los empleados en este experimento.
No se observaron diferencias en la altura de
las plantas ni en la altura de carga del ajonjolí para los tratamientos
experimentales (Tabla 4); en la cantidad de cápsulas
por planta y el rendimiento, la fertilización con NPK superó
significativamente a los restantes tratamientos. En esta especie se
destaca el uso de algas marinas (Kappaphycus y Gracilaria)
o extractos de estas, que contienen aminoácidos, fitohormonas y otros
compuestos orgánicos y que han incrementado el rendimiento 30,31.
En otro estudio la aplicación foliar de extractos de algas marinas y de
hojas de plantas terrestres ejerció efectos similares a los causados
por el empleo de reguladores del crecimiento sintéticos 32.
El hecho de no haber encontrado efectos estimulantes en la presente
investigación sugiere la necesidad de ampliar el espectro de
bioestimulantes y sus dosis, para buscar una alternativa sostenible de
producción. No obstante, es destacable que con el biol artesanal se
alcanzó el 78,67 % del rendimiento obtenido con NPK, y se superó el
alcanzado en el suelo sin aplicación en un 22,48 %. Esto avala la
posibilidad de su empleo como alternativa amigable con el ambiente, y
estimula la realización de investigaciones con otras dosis de este
producto.
En la actualidad no existen estudios
detallados sobre los mecanismos fisiológicos de acción de la gran
cantidad de sustancias naturales, microorganismos y productos más o
menos elaborados que se consideran bioestimulantes. Ello se debe en gran
medida a los altos costos de los análisis de la composición de los
bioestimulantes, que conspiran contra la rentabilidad de su uso, sobre
todo si se tiene en cuenta el enfoque agroecológico y sostenible de su
empleo (que los campesinos produzcan sus propios bioestimulantes). Se
conoce, en cambio, que los bioestimulantes favorecen los procesos de
crecimiento y desarrollo de las plantas a través del mejoramiento de la
disponibilidad de los nutrientes en el suelo, el incremento de la
absorción y asimilación de elementos minerales 33, y el aumento de la tolerancia de los vegetales al estrés 34,
todo lo cual conduce a la obtención de mayores rendimientos. Los
efectos observados en esta investigación concuerdan con lo esperado, de
acuerdo con la definición de bioestimulantes que ofrecen otros autores 3,35.
CONCLUSIÓNEn
general, los bioestimulantes ensayados en el presente estudio producen
resultados alentadores, pues logran igualar o superar a los obtenidos
con la fertilización química sintética en las especies en que se
emplearon.
RECOMENDACIONES
Sería
conveniente realizar estudios a mayor escala que permitan corroborar
estos resultados, con vistas a su introducción futura en la producción
agrícola como alternativa sostenible, como sustitutos totales o
parciales de la fertilización con productos químicos sintéticos.
También
sería útil la investigación de los mecanismos fisiológicos de acción de
estos bioestimulantes en las especies ensayadas, como vía para la
futura formulación de otros productos de este tipo.
Traducir DocumentoOriginal articleInfluence of biostimulants on growth and yield of short cycle crops in Manabí, Ecuador
[0000-0003-1371-7345] Eduardo Héctor-Ardisana [1] [*]
[0000-0001-7095-051X] Antonio Torres-García [2]
[0000-0002-2245-2943] Osvaldo Fosado-Téllez [1]
[0000-0003-3511-4019] Soraya Peñarrieta-Bravo [2]
[0000-0002-8386-1732] Jorge Solórzano-Bravo [3]
[0000-0002-4101-4404] Vicente Jarre-Mendoza [3]
[0000-0003-4321-2794] Fabián Medranda-Vera [3]
[0000-0002-0237-6189] José Montoya-Bazán [3]
[1] Instituto de Posgrado, Universidad Técnica de Manabí, Ecuador
[2] Facultad de Ingeniería Agronómica, Universidad Técnica de Manabí, Ecuador
[3] Estudiante
de la Maestría en Agronomía, mención Producción Agrícola Sostenible,
Facultad de Ingeniería Agronómica, Universidad Técnica de Manabí,
Ecuador
[*] Author for correspondence: ehectorardisana@gmail.com
ABSTRACTThe agricultural
model of the Green Revolution has led to the gradual degradation of
soils, which is motivated by the impacts it causes, among which stands
out the indiscriminate use of synthetic fertilizers, which while
increasing yields to some extent, also acidify the soil, accumulate
salts, provoke hydric stress and pollute water and crops. Biostimulants
are an alternative to these practices, as they are microorganisms or
products that favorably influence plants, not only due to the
contribution of nutrients but also because they contain substances such
as proteins, amino acids, humic and fulvic acids, growth regulators, and
other beneficial molecules. Preliminary results of several
investigations on the use of organic biostimulants (bioles, manure and
vermicompost leachates, humic acids, efficient microorganisms) on four
short-cycle species are presented: stevia (Stevia rebaudiana Bertoni), Swiss chard (Beta vulgaris L. subsp. cicla), peanuts (Arachis hypogaea L.) and sesame (Sesamum indicum
L.). Variables that characterize the growth and yield of each of the
studied species were evaluated, during a crop cycle, in experimental
designs of completely randomized blocks. In general, the use of any of
the biostimulants tested allowed similar or superior results to those
obtained with chemical fertilization in the four species studied. The
results obtained stimulate the use of these biostimulants as substitutes
or complements of conventional chemical fertilization in these species,
contributing to the sustainability of agricultural production without
prejudice to the environment.
INTRODUCTIONIn
South America, agricultural production is diverse and complex,
resulting from the traditions of each country, and it is obtained at the
cost of a deep ecological footprint, because of the need for the
countries of the subcontinent to remain as producers and exporters of
agricultural items that they play an important role in their trade
balances 1.
Ecuador
does not depart from the tendency to exploit the land in an intensive
and indiscriminate way. Among the inputs used to achieve adequate yields
are nitrogen, phosphoric and potassium fertilizers, of which the
country applied an average of 124.03 kg ha-1 in 2014, a figure slightly lower than the average for the subcontinent, which is of 135.46 kg ha-1 (2
but undoubtedly very high. In addition, most farmers apply fertilizers
without considering the amounts of nutrients present in the soils or the
needs of the crops, leading to excessive use that has negative
environmental consequences.
One of the organic
alternatives to stimulate the growth and development processes of plants
is the use of biostimulants, which are defined as substances or
microorganisms that, applied to plants, increase the absorption and
assimilation of nutrients, their tolerance to stress or improve their
agronomic characteristics, regardless of the content of nutrients they
provide 3. Among the most used biostimulants are vermicomposting, its leachates and efficient microorganisms 4-7.
Stevia (Stevia rebaudiana Bertoni), chard (Beta vulgaris L. subsp. Cicla) and sesame (Sesamum indicum L.) are short-cycle crops that are not among the predominant ones in Ecuadorian agriculture. Peanuts (Arachis hypogaea
L.), also short-cycle, although occupying much higher agricultural
areas, is not a high-impact item in the country's agricultural system.
However, consumer appreciation for these species is increasing: stevia
for its sweetening and medicinal use 8), chard for its antioxidant and anti-cancer properties 9, peanuts for its high content of oils, proteins and carbohydrates 10) and sesame for the anticancer power of the sesamol contained in its seeds 11.
Given
this increase in demand and consequently in the interest of producers
it is necessary to propose alternatives that allow obtaining high yields
without creating a dependence on synthetic chemical fertilizers, which
would affect the economic and ecological sustainability of these
agroecosystems.
This research aimed to evaluate
the effect of various biostimulants on the growth and performance of
these species, in comparison with fertilizer products of
chemical-synthetic origin.
MATERIALS AND METHODSLocation of the experimentsThe
tests on stevia and chard were developed in the experimental campus "La
Teodomira" of the Faculty of Agronomic Engineering of the Technical
University of Manabí, located in the Lodana parish, Santa Ana canton, at
01º14 'LS and 80º23' LW with an altitude 60 meters above sea level,
between June and August 2018, under semi-protected cultivation
conditions. The peanut study was carried out at the “Don Fabián” farm,
located on the Chone-Calceta road, at 0º50 'LS and 80º15' LW with an
altitude of 50 m a.s.l, in the period between August and December 2017.
The study with sesame, it was carried out on the Montoya Bazán family
farm, located on the Babahoyo-Febres Cordero parish road, at 02º09 'LS
and 79º53' LW with an altitude of 20 meters above sea level, between
June and September 2018. The first three localities belong to the
province of Manabí and the last to the province of Guayas, Ecuador.
Vegetal materialAll
the seeds used were of certified origin. In the stevia, the Morita 2
variety was used; in chard, the Fordhook Giant variety was used; in
peanuts the variety "Criolla Caramelo" was used and in sesame the
variety "Portoviejo 1". Stevia, chard and sesame seeds were sown in
germinating trays with alveoli of 5 x 5 cm (one seed per alveolus) with
decomposed soil and plant residues, in a 1:3 (v/v) ratio, and once the
plants were obtained with adequate vigor they were transplanted to the
place of the experiment. The peanuts were sown directly, placing two
seeds per site to guarantee germination.
BioestimulantsAll
the biostimulants used in this research are products of organic
composition, conceived to provide producers with sustainable
alternatives to chemical fertilization. Two of them (Bioactivated and
Humisil®) are commercial formulations based on microorganisms
or humic acids. The rest (bovine manure leachate, bovine manure
vermicomposting leachate, chicken manure leachate, artisanal biol, and
efficient microorganisms) are products of simple manufacture from crop
residues or animal excrement, which can be made by producers in their
own farms.
The bovine manure leachate (LEB) and
the vermicompost leachate of bovine manure (LVEB) were supplied by the
Ministry of Agriculture, and are produced at the Cañita site of the
Charapotó Parroquia del Sucre canton, Manabí province, Ecuador. The
preparation of the chicken manure (LG) leachate was carried out in a 100
L tank to which 25 kg of chicken manure and 50 L of water were added.
The mixture was left to ferment for 45 days and subsequently the
leachate was filtered through a fine cloth. Leachates were applied with a
manual pump by foliar spraying, and four applications were made every
10 days after transplanting (DAT) or sowing the crop, with a product
volume equivalent to 1000 L ha-1.
The Bioactivated product was supplied by Bbo Agro, S. A. from Guayaquil, Ecuador, and is a liquid biopreparation based on Saccharomycetes sp., Bacillus sp., Lactobacillus
sp. and actinomycetes. The artisanal Biol was prepared with organic
products and harvest residues in the following proportions: 18 kg of
bovine manure, 13.5 kg of alfalfa and pea harvest residues, 0.9 kg of
yeast, 9 kg of molasses, 13.5 kg of rice husk and 4 liters of bovine
milk serum. All components were homogenized in a plastic tank up to 200 L
with water. Subsequently, the tank was covered and the mixture was left
to ferment for 45 days in the shade, at room temperature. After this
time the contents of the tank were filtered through a fine cloth. Both
products were applied by spraying with a manual pump on the ground, next
to the plant; three applications were made every 10 DAT, with a volume
of product equivalent to 1000 L ha-1.
Humisil® is produced by Greentech®
in Guayaquil, Ecuador, and contains 18 % humic acids, 4.02 % N-P-K and
1.5 % active silica. Five foliar applications were made by spraying with
a manual pump, every 15 DAT, with a volume of product equivalent to
1000 L ha-1.
Efficient microorganisms
(EM) were produced at the Experimental Station of the Faculty of
Agronomic Engineering of the Technical University of Manabí, cultivating
Lactobacillus plantarum (104 UFC L-1), Lactobacillus casei (104 UFC L-1), Rhodopseudomonas palutris (103 CFU L-1), Saccharomyces cerevisiae (103 CFU L-1),
molasses 10 % and pasteurized milk 15 %. After adjusting the pH to 3.5
the mixture was allowed to ferment at room temperature under anaerobic
conditions for 15 days, and then air was permanently supplied by pumping
for 15 days. Finally, the mixture was filtered through a fine cloth. 5
applications were made every 10 DAT. In each one of them, 150 ml of the
efficient microorganism preparation were supplied to the soil, around
the plant.
Chemical fertilizersThe
fertilization with N-P-K in each crop was by application to the soil
carried out, with the formulations and doses used by the producers on
their farms. Calcium was applied by foliar spraying, as recommended by
various authors 12,13.
Experimental design and variables evaluatedIn the experiments carried out in the four species, randomized complete block designs were used.
In
the experiment with stevia, four replications were included, each with
24 plants, of which the 6 central plants of the plot were evaluated. The
experimental treatments consisted of two calcium concentrations (2 and 5
g L-1) applied foliar (10 m L plant-1, 5 applications every 15 DAT), two dilutions of Humisil® (1/10 and 1/20 v/v), chemical fertilization with NPK (18-18-18; 20 g plant-1
at 15 DAT) and a treatment without fertilizers or biostimulants. At 45
DAT the height of the plant (cm), the diameter of the stem (cm) and the
number of leaves per plant were determined. The harvest of leaves and
stems was carried out at 60, 75 and 90 days, and based on the total dry
mass of these, the yield (t ha-1) of each treatment was estimated.
In
the study carried out on chard, three repetitions were used. Each
replication included 24 plants, of which the 6 central plants of the
plot were evaluated. The experimental treatments were: chemical
fertilization with NPK (15-15-15; 20 g plant-1, of which 10 g
as background fertilization and 10 g at 15 DAT), two dilutions of
vermicompost leachate from bovine manure (1/10 and 1/20 v/v) and two
from efficient microorganisms (1/10 and 1/20 v/v). At 60 days the length
and width of the leaf (cm), and the dry mass (g) and root volume (cm3)
were determined. Two harvests were carried out at 38 and 60 days, and
with the total fresh mass (g) of the biomass of both, the yield (t ha-1) of each treatment was estimated.
The
study with peanut included four replicates. The treatments consisted of
three dilutions of bovine manure leachate (1/10, 2/10 and 3/10 v/v),
three of poultry manure leachate (1/10, 2/10 and 3/10 v/v), three of
vermicomposting leachate from bovine manure (1/10, 2/10 and 3/10 v/v),
chemical fertilization with NPK (100-25-50; 5 g plant-1, as
background fertilization) and a treatment without fertilizers or
biostimulants. At 60 days, the height (cm) of three plants taken at
random in the center of the plot was determined. At the time of harvest
(120 days) the amount of nodules present in the same plants was counted;
100 pods were also taken at random in each plot to which the dry mass
(g) was determined to estimate the yield of dry pods (t ha-1). The grains of these pods were determined the dry mass (g) to estimate the yield of dry grains (t ha-1).
In
the sesame experiment, three replications were established. The
treatments were: Bioactivated (1/20 v/v), artisanal biol (1/20 v/v),
chemical fertilization with NPK (50-25-50; 125 g plant-1 at
20 and 45 DAT) and a treatment without fertilizers or biostimulants. In
20 plants selected at random in each experimental unit, the following
variables were measured: plant height (cm) at 110 DAT; loading height
-the height at which the lowest capsule is located- (cm) at 60 DAT;
number of capsules per plant at 130 DAT; at this last moment the dry
mass (g) of the seeds of these capsules was determined to estimate the
performance of each treatment (kg ha-1).
Statistical analysisAfter
verifying the normality and homoscedasticity of the data (with the
Kolmogorov-Smirnov and Levene tests, respectively) the data of the
variables were processed with a simple analysis of variance. The means
of the treatments were compared with the Tukey test (p<0.05). The IBM
SPSS Statistic v.21 software was used.
RESULTS AND DISCUSSION
Tables 1- 4 show the results of the influence of the different products applied in each of the species on the growth and yield variables.
In stevia, no significant differences were
observed in the stem diameter variable. On the other hand, statistical
differences were found in the remaining variables, highlighting in plant
height Humisil® (1/10 v/v) and calcium (2 g L-1);
in the number of leaves, the best results were obtained with the
treatment fertilized with NPK, with the two dilutions of Humisil® and with calcium (2 g L-1). It is noteworthy that in these three variables the treatments with Humisil® (1/10 v/v) and calcium (2 g L-1) always produced statistically similar or superior results to those obtained with NPK. In yield, calcium (2 g L-1), Humisil®
(1/10 v/v) and fertilized treatment were at the same level, although
the latter did not differ from the control without application.
In
this species, studies on the use of biostimulants have focused on the
inoculation of plants with growth-promoting rhizobacteria and arbuscular
mycorrhizal fungi or combinations of these 14,15, and to a lesser extent microorganisms and organic products have been combined such as manure and vermicompost 16.
The results obtained in these investigations, superior in all cases to
those achieved with chemical fertilizers, have been attributed to an
improvement in the absorption of nutrients by plants.
The yields obtained with the use of biostimulant products such as Humisil®
are generally attributed not to the concentration of nutrients present
in them, but to the contribution of humic acids. These substances
activate plant metabolism, favorably affecting the absorption and
assimilation of nutrients, the absorption of water, and increasing
tolerance to different types of stress 3,4,6. As for calcium, this element plays an important role as a messenger in plant responses to environmental and hormonal signals 17.
In stevia, in particular, calcium deficiencies cause necrosis in the
leaf primordia, a reduction in the content of steviosides, brittle
branches and short and thin roots 18.
These effects can explain the results obtained in the variables height
of the plant and number of leaves, determining components of the yield
in this species.
In chard (Table 2), the
application of biostimulants produced results that equaled or surpassed
NPK fertilization in all the variables related to vegetative growth.
Regarding the yield, the two dilutions of vermicompost leachates from
bovine manure were significantly superior to fertilization with NPK; the
treatment with efficient 1/20 (v/v) microorganisms did not differ from
the leachate treatments or the NPK-fertilized treatment; in turn, NPK
fertilization did not show significant differences with the 1/10 (v/v)
dilution of efficient microorganisms. That is, the application of either
of the two biostimulants always led to yields equal to or greater than
those obtained with NPK. The most widely used biostimulants in chard
have been Kelpak, rich in auxins and cytokinins, produced from the
seaweed Ecklonia maxima, and which increases the dry mass of leaves and roots 19, VIUSID, with a high content of various amino acids, which increases yields by 29.50 % 20.
Besides, efficient microorganisms, which lead to increases in
chlorophyll content and improvements in the soil, but not to significant
increases in biomass 21.
Several biostimulants (3/10 v/v chicken
manure leachate, and 2/10 and 3/10 v/v bovine manure vermicompost
leachates) reached high values in the variables of plant height, nodules
per plant and dry pod yield obtained in peanuts (Table 3),
similar to fertilization with NPK. In particular, with the 3/10 (v/v)
chicken manure leachate and with the three dilutions of vermicompost
leachate from bovine manure, nodulation levels were significantly higher
than those of the soil to which no product was applied, although it is
evident that in the soil there are populations of rhizobia compatible
with the crop. Other authors have found similar increases in this
symbiotic process in the presence of vermicompost 22-24.
The
yield of dry grains with NPK was significantly by the vermicompost
leachate exceeded from bovine manure in the 2/10 and 3/10 dilutions
(v/v). In this species, the application of the biostimulant Stimulate®,
rich in auxins, cytokinins and gibberellins, favors the production of
vigorous and healthy seeds, alone or combined with chemical elements 25,26. The biostimulant Nutrifer® 202, although it includes several types of micronutrients of inorganic origin, also contains extracts of seaweed (Ascophyllum nodosum)
that provide amino acids, vitamins and phytohormones, and acts on the
general metabolism of peanut plants, favoring their growth, development
and nodulation, especially in combination with Bradyrhizobium sp. 27. The use of vermicompost has caused increases in the yields in this species 28,29 so similar effects can be expected in its leachates, as those used in this experiment.
No differences were observed in the height of the plants or in the loading height of sesame for the experimental treatments (Table 4).
In the number of capsules per plant and yield, NPK fertilization
significantly surpassed the other treatments. In this species, the use
of marine algae (Kappaphycus and Gracilaria) or extracts
of these, which contain amino acids, phytohormones and other organic
compounds and which have increased yield, stands out 30,31.
In another study the foliar application of extracts of seaweed and
leaves of terrestrial plants exerted effects similar to those caused by
the use of synthetic growth regulators 32.
The fact that no stimulant effects were found in the present research
suggests the need to broaden the spectrum of biostimulants and their
doses, in order to find a sustainable alternative for production.
However, it is noteworthy that with the artisanal biol, 78.67 % of the
yield obtained with NPK was reached, and that reached in the soil
without application was exceeded by 22.48 %. It supports the possibility
of its use as a friendly alternative to the environment, and encourages
research with other doses of this product.
At
present, there are no detailed studies on the physiological mechanisms
of action of the large number of natural substances, microorganisms and
more or less elaborated products that are considered biostimulants. This
is largely due to the high costs of analysis of the composition of
biostimulants, which conspire against the profitability of their use,
especially if the agroecological and sustainable approach to their use
is taken into account (that the peasants produce their own
biostimulants). On the other hand, it is known that biostimulants favor
the growth and development processes of plants through the improvement
of the availability of nutrients in the soil, the increase in the
absorption and assimilation of mineral elements 33, and the increase of the tolerance of vegetables to stress 34,
all of which leads to obtaining higher yields. The effects observed in
this research are consistent with expectations, according to the
definition of biostimulants offered by other authors 3,35.
CONCLUSIONIn
general, the biostimulants tested in the present study produce
encouraging results, since they manage to equal or exceed those obtained
with synthetic chemical fertilization in the species in which they were
used.
RECOMMENDATIONS
It
would be convenient to carry out studies on a larger scale to
corroborate these results, with a view to their future introduction in
agricultural production as a sustainable alternative as total or partial
substitute for fertilization with synthetic chemicals.
It
would also be useful to investigate the physiological mechanisms of
action of these biostimulants in the species tested, as a way for the
future formulation of other products of this type.